Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan, además, que el 27% de los pueblos tiene menos de 101 habitantes.
Los municipios de Salamanca se quedan sin futuro y sin oportunidades; y no, no es una afirmación oportunista y sin argumentos, es la triste realidad de una provincia que agoniza.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) son cada día más dramáticos y ponen el foco en la despoblación como el principal problema de Salamanca, por mucho que el Partido Popular lo niegue una y otra vez y rechace las iniciativas socialistas para poner soluciones a esta sangría.
De los 362 municipios que componen el territorio salmantino, 306 cuentan con una población máxima de 500 habitantes; o, lo que es lo mismo, 98 pueblos tienen menos de 101 habitantes (27%) y 208 tienen entre 101 y 500 personas censadas.
Estos 306 pueblos representan el 84,5% del total de una provincia que ve como el éxodo rural cada vez es más pronunciado e, incluso, la huida hacia otras zonas del territorio español o el extranjero. Todo ello, ante la inacción y con la complicidad del Partido Popular de Fernández Mañueco, García Carbayo y Javier Iglesias.
Los datos del INE también señalan que 27 localidades salmantinas tienen entre 501 y 1.000 habitantes; 13, entre 1.001 y 2.000 habitantes; 6, entre 2.001 y 5.000 habitantes y otros 6 entre 5.001 y 10.000 habitantes, mientras que solo tres municipios tienen entre 10.001 y 20.000 habitantes. Solo la capital está en la franja entre 100.001 y 500.000 censados, con poco más de 140.000 habitantes.
CASTILLA Y LEÓN, LA MISMA LÍNEA
Por su parte, las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) son igual de pesimistas en el ámbito de una Comunidad que cuenta con 2.248 municipios.
De ellos, el 80,2% tiene como máximo 500 habitantes (1.803), mientras que 754 pueblos (33,5%) tiene menos de 101 habitantes censado en Castilla y León.
El problema de la despoblación sigue teniendo una importancia esencial en la provincia de Salamanca y en el conjunto de la Comunidad, algo que no parece importarle mucho a un PP que sigue sentado en el sillón de ver la vida pasar… mientras nuestros pueblos se mueren.



