La secretaria de Organización del PSOE-CyL subraya que en Francia ha funcionado el cordón sanitario, el mismo que Tudanca ofreció a Mañueco.

La secretaria de Organización del PSOE-CyL, Ana Sánchez, considera “determinante” seguir denunciando los atropellos que la extrema derecha comete en Castilla y León desde el Gobierno de la Comunidad y que, jueves tras jueves, “sigue permitiendo Mañueco” con el único propósito de seguir en el poder”.

Tras los resultados electorales en Francia, Sánchez recuerda que Mañueco “fue el lamentable pionero” en meter a la extrema derecha en los gobiernos y en las instituciones. “Esa fue, también, la primera decisión que avaló Feijóo en cuanto fue elegido presidente del PP”, aseguró Sánchez, que añadió: “de ahí los males de Feijóo, que nunca será presidente”.

Sánchez también subrayó que el líder del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, ofreció a Mañueco la posibilidad de gobernar en solitario, sin el lastre de Vox, y se negó a ello.

Por eso, sostiene Sánchez, y después de ver lo que ha ocurrido en Francia y otros países, “exigimos que devuelva la dignidad a Castilla y León. ¿Pueden seguir en el lado malo de la historia perjudicando el futuro de nuestros hijos? ¿Tomando decisiones cada jueves sobre sus vidas?”, afirma la dirigente socialista.

Sánchez señaló que “hay que seguir denunciando sin cesar cada día los atropellos y el consentimiento, aunque sea ingrato”, porque, añadió, “los socialistas hemos conseguido frenar el protocolo antiabortista de Mañueco y Gallardo o la Ley “de la discordia”; la insignia del colectivo LGTBI ha ondeado en las Cortes de Castilla y León, por segundo año consecutivo; y hemos defendido el Diálogo Social y la existencia del Serla frente al “derribo intencionado” del Gobierno de Mañueco, por poner solo algunos ejemplos.

“Hoy, el mundo está abriendo los ojos. Hoy, el mundo ha puesto pie en pared y está frenando la extrema derecha. Lo han hecho en la UE y ahora en Francia. Mientras, los socialistas en Castilla y León seguiremos haciendo frente a la barbarie de Mañueco”.

Lamentó que el “lamentable ejemplo de Mañueco” haya tenido continuidad en Aragón, Extremadura, Murcia, Comunidad Valenciana y en 140 ayuntamientos. “Con la extrema derecha ni se pacta ni se gobierna”, asevera Sánchez, que reitera que “si Mañueco fue el primero en meter la extrema derecha en las instituciones, debería ser el primero en sacarla”.