El resultado del Estudio comparativo de la retribuciones de los Facultativos Residentes en España no puede ser más contundente para Castilla y León.
El mencionado informe refleja que los Médicos Internos Residentes (MIR) se hallan entre los peor pagados de todo el país, porque perciben un salario bruto mensual de entre 2.412 (1.829 netos) y 3.457 euros brutos (2.482 netos), en función de si se trata de un MIR de primer o quinto año.
Estas cifras reflejan la comunidas sólo está por delante de Andalucía (2.375 y 3.338), y Canarias (2.397 y 3.404), y por debajo de la media nacional, entre 2.558 y 3.593 euros brutos (1.931 y los 2.568 euros netos).
El informe elaborado por el Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, uno de los más completos, cuenta además con datos con una guardia semanal (80 horas mensuales, 50 en laborable, 17 en sábado y 13 en festivo) y teniendo en cuenta que los MIR tienen la obligación de realizar guardias, las retenciones de la nómina suponen que entre un 30 y un 35 por ciento del bruto se queda en manos de Hacienda.
Sin las guardias, su salario oscila entre los 1.282 euros brutos de los R1 y los 1.769 euros de los R5, que si se descuentan el IRPF y la Seguridad Social se quedan en 1.106 euros y los 1.388 euros netos. En ambos casos, se sitúan también por debajo de los 1.342 euros brutos al mes y los 1.830 del conjunto del país, que con los descuentos bajan hasta los 1.143 y los 1.439 euros, y lejos de los 1.521 2.036 brutos (1.263 y 1.578 netos) que perciben en Baleares, la autonomía que mejor paga a los MIR. En este caso, los residentes de Castilla y León se encuentran en el rango de autonomías como Andalucía y Cantabria, Galicia (entre 1.282 y 1.768) y Navarra (de 1.288 y 1.778).
