La mayoría usada como frontón por el equipo de Gobierno en cada pleno lleva a la provincia a una situación de sangría poblacional y carencias sanitarias y de servicios públicos básicos.
El ‘No’ como forma de gobierno; ésa es la seña de identidad del PP en la Diputación de Salamanca, sin darse cuenta de que su actitud negativa no hace otra cosa que perjudicar a la provincia.
Cada pleno ordinario que celebra esta institución siempre mantiene la misma dinámica de actitud autoritaria por parte del equipo de Gobierno, que rechaza de manera sistemática cualquier moción o propuesta del PSOE de Salamanca para mejorar la vida de la ciudadanía.
Y no, no hablamos de cuestiones banales y sin ningún tipo de relevancia para la provincia; se trata de asuntos como la despoblación, el transporte, la vivienda o la sanidad... casi nada. ¿Qué propuestas ha rechazado el PP de la Diputación sólo por el mero hecho de tener su origen en el PSOE de Salamanca?
Plan del Oeste de Salamanca: el PSOE solicitó un plan territorial con la ayuda de la Junta de Castilla y León y la Diputación de Salamanca.
Ley de Concordia: el PP se negó a trasladar a su ‘jefe’ la inaceptable nueva Ley de Concordia pactada por el PP con su socio VOX en la Junta.
Gaza: rechazo de una moción sobre el conflicto bélico, también por orden de los ‘de arriba’.
UVI Móvil en Vitigudino – Soporte Vital Básico en Ledesma – Soporte Vital Avanzado en Peñaranda: el PP ha rechazado de manera reiterada la petición de una UVI Móvil para la comarca de Vitigudino, privando a la ciudadanía de un servicio tan básico como la sanidad, al igual que en las comarcas de Ledesma y de Peñaranda.
Plan de Vivienda: el PSOE llevó al pleno un proyecto para tratar de evitar las viviendas vacías y poder asentar población en el mundo rural. El PP también se negó a colaborar en esto.
Plan de Carreteras: el equipo de Gobierno también dijo “NO” a tener un transporte por carretera de calidad en las vías de su competencia.
Despoblación: la consecuencia de todas las negativas del PP tiene su culmen en el mayor mal que sufre la provincia, que no es otro que la pérdida fulminante de población. El equipo de gobierno niega el problema y sigue con su inmovilismo absoluto por poner solución a esta lacra.
Silencio el Béjar: el PP de Carlos García Carbayo, Javier Iglesias y Alfonso Fernández Mañueco no quiere saber nada del caos y el ocaso que está viviendo la ciudad de Béjar. Oscurantismo, incapacidad en la gestión, práticas mafiosas… están a la orden del día en un municipio que sufre las consecuencias de un bochorno diario.
Ante esta situación, el PP de Carlos García Carbayo, de Javier Iglesias y de Alfonso Fernández Mañueco, no se da cuenta de que no dice “NO” al PSOE de Salamanca, está diciendo “NO” a mejorar la vida de todos los habitantes de la provincia. Y se dedica a desprestigiar la figura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en lugar de gastar sus esfuerzos en gobernar por y para Salamanca con la ayuda de todos.